¿Qué diferencia hay entre prejubilación y jubilación anticipada?

Estas son las principales distinciones entre los dos tipos de jubilaciones, sus requisitos para solicitarlas y cuál de las dos es mejor pedir

Diferencias entre una prejubilación y una jubilación anticipada
Gema Fernández

Retirarse del mercado laboral antes de tiempo es una medida que solicitan muchos trabajadores. No obstante, se puede hacer de varias formas: jubilación anticipada o prejubilación. La principal diferencia entre la prejubilación y la jubilación anticipada, es que la primera no se trata de un acuerdo entre la empresa y el trabajador, y la jubilación anticipada se encuentra regulada por la Seguridad Social. Entre estos dos tipos de jubilación hay otras diferencias y la cuantía que percibe la persona puede variar en función de diversos factores. 

En España, cualquier persona puede jubilarse antes de la edad marcada, pero para poder percibir una pensión contributiva mínima se debe tener, al menos, 15 años cotizados y ajustarse a una serie de requisitos específicos.

Y además, dos de esos años deben de estar dentro de los últimos 15 del momento que solicite la jubilación. Son muchos los requisitos y ajustes que pueden afectar a una persona que decida solicitar su jubilación antes de tiempo, por eso, conviene tener muy claros los conceptos básicos. 

¿Qué es la prejubilación? 

Es una negociación entre la empresa y el trabajador, donde la persona rompería su relación laboral con la compañía, y pasaría a ser desempleada. No se encuentra regulada por la Seguridad Social, y en muchas empresas se realizan en aquellos empleados que se acercan a la edad de jubilación, pero que no desean solicitar la jubilación anticipada. 

Es un tipo de jubilación a la que no pueden acceder todos los trabajadores, ya que no se encuentra regulada en una ley general. La persona afectada pasaría a cobrar la prestación por desempleo, y la empresa, también, debe abonar una indemnización al empleado. 

Es una medida a la que se acogen algunas compañías cuando proceden a realizar despidos colectivos, sobre todo, en aquellas personas que se acercan a la edad de jubilación.

¿Qué es la jubilación anticipada? 

Se tramita cuando un trabajador desea solicitar la prestación por jubilación antes de tiempo, o lo que es lo mismo, antes de la jubilación ordinaria. Esta si es una medida que se encuentra registrada en la Seguridad Social, y la persona cuenta con pleno derecho de cobrar una pensión. 

En España cada año la edad de jubilación va incrementando hasta tal punto, de que en 2027, quede fijada en los 67 años, o en los 65 años, en el caso de tener 38 años y 6 meses de cotización.

Entre sus requisitos para que un trabajador pueda solicitar la jubilación anticipada destaca que debe tener como mínimo 63 años, es decir, su edad debe ser dos años inferior a la edad obligatoria de jubilación.  Además, de tener al menos 35 años cotizados, y dos de estos deben estar dentro de los últimos 15 años anteriores a la jubilación. 

También, está el caso de la jubilación anticipada forzosa, que es cuando la empresa obliga al trabajador a solicitar su jubilación antes de la edad obligatoria. Para este caso se debe de tener una edad mínima de cotización de 33 años. 

Señalar, que en ambos casos, tanto en la voluntaria como la forzosa, la pensión se ve reducida, porque se comienza a cobrar una cuantía antes de la edad obligatoria. Además, se aplican una serie de coeficientes reductores, que se aplican en función de los años cotizados de cada persona. 

Una vez que se tiene más claro los diferentes conceptos de ‘jubilación anticipada’ y ‘prejubilación’, quizás, muchos lectores se pregunten que cuál de este tipo de jubilaciones conviene escoger. 

¿Qué tipo de jubilación es mejor para el trabajador? 

Las dos coinciden en que el trabajador se jubila antes de la edad establecida, pero cuando se habla del importe de dinero que se recibe al mes, la cosa cambia. 

Para la jubilación anticipada, la SS aplicará una serie de cocientes reductores sobre la pensión dependiendo de los años cotizados, y que también, puede variar según los trimestres o fracciones de meses que necesite el trabajador para cumplir la edad obligatoria de jubilación. 

Por ejemplo, si este tipo de jubilación es voluntaria el coeficiente reductor es del 2% por trimestre, con una cotización de 38 años y 6 meses, mientras que si supera los 44 años de cotización, el porcentaje reductor que se aplica es de solo 1,625% por trimestre.  En cambio, si la jubilación anticipada es forzosa el coeficiente reductor se puede reducir hasta un 1,5% por trimestre. 

Y por último, en la prejubilación se aplican normas diferentes, ya que va en función del acuerdo al que lleguen el trabajador y la empresa. Además, no todas las empresas aceptan este tipo de jubilación.

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